Quilmes Hostel en Mar del Plata, Buenos Aires / Horacio Gallo
Quilmes Hostel busca darle un giro a la vida de los jóvenes ofreciendo un tipo de hospedaje único en la ciudad de Mar del Plata. Con ambientes diferentes y un claro estilo vanguardista, el desarrollo propone alternativas diferentes para entretener y sorprender a sus huéspedes. El reconocido decorador e interiorista Horario Gallo estuvo a cargo de la decoración: “La imagen y equipamiento es fundamental para transmitir alegría y propiciar encuentros en los diferentes ambientes del hostel. Los colores saturados de las paredes y los del fondo de la pileta alegran los espacios. El mobiliario juega con los íconos marplatenses y la vanguardia, y las zonas comunes amplias con la profusión de verdes naturales. Las habitaciones manejan el concepto estándar de hostel remixándolo con lenguaje de cabina de barco, despertando infinidad de ideas y desafíos en los huéspedes”, mencionó Horacio Gallo.
Este nuevo hostel promete generar encuentros demostrando que la singularidad y la diversidad son factores fundamentales para enriquecernos como personas. Dentro de la innovadora propuesta se podrán disfrutar actividades como un extenso muro de los recuerdos, una cabina de selfies, un piano de cola, un metegol 11 vs. 11, surf de pared y barras Quilmes.
A la hora de diseñar el espacio exterior el diseñador propuso una interesante medianera con mecetas que genera cierta transparencia con el vecino. Inspirados en el trabajo de un artista plástico californiano se pintó el fondo de la pileta con una divertida trama que simula la deformación del agua. Acompañan este espacio una serie de carpas flexibles que proponen un uso privado de relax y también se destacan por su flexibilidad a la hora de convertirse en una gran carpa. Dos parrillas ofrecen cervezas y comidas de parrilla.
El diseño en los espacios comúnes es uno de los aspectos más interesantes del proyecto, ya que como anuncia el diseñador “La impronta de la decoración estaba dada por generar espacios comúnes que promuevan la interacción entre los huéspedes y sean flexibles a la hora de adaptarse a distintas actividades”. Pensando en este concepto se generó un equipamiento de estilo sofá, que se unifica con diferentes piezas articuladas y se acompaña con una chimenea de mármol y una biblioteca. Este espacio fue pensado para visualizar películas, descansar o incluso disfrutar de juegos.
“Abrimos las puertas de un hostel diferente e innovador, porque sabemos que en espacios de este estilo, los jóvenes se divierten y tienen la posibilidad de vivir momentos que deriven en experiencias tan variadas que cuando salgan de aquí, no serán los mismos. Y es que cada encuentro es un acto que nos cambia, que nos aporta algo y por eso queremos con Quilmes Hostel invitar al encuentro, que no es un fin en sí mismo, sino un punto de partida hacia algo más” señaló Agustín Mostany, director de la marca Quilmes.